Mientras Lawrence y Col caminaban rio abajo junto al rio, iban conversando sobre el misterio de las monedas de cobre. ¿Había forma de sacar provecho de esa información? ‘La ignorancia es un pecado’. Una frase que Lawrence le enseñó a Col al comprarle los papeles. Sin embargo, aquella frase iba más allá de lo simple. Aquella ignorancia no hacía referencia a la falta de conocimiento, sino a la falta de sabiduría. No era cuestión de desconocer los detalles de cierta situación, sino de no ser capaz de predecir lo que podría suceder en ciertas circunstancias. Intentar adelantarse a los demás. Lawrence también le enseñó una manera eficaz de conseguir comida utilizando a un cómplice. Ya que Col necesitaría ser capaz de sobrevivir por sí mismo y además de eso, como Lawrence no podía ser su patrocinador, él tendría que vérselas por sí mismo.

Cuando llegaron a cierto punto del camino, pudieron divisar a lo lejos el centro del meollo, lo que posiblemente era el origen del problema, un barco encallado. Ya que estaba a una distancia considerable aún, ambos seguían su conversación. Col le contó que era de una ciudad del norte, cerca de donde estaban; pero para estudiar derecho canónico debió relacionarse con inmigrantes del sur según la deducción de Lawrence. También le contó sobre la historia de su pueblo y de la iglesia que llegó a donde ellos. Con todo esto, Lawrence dedujo cual era el motivo que movía a Col a estudiar derecho canónico. Visto de lejos, parecía un festival a los ojos de Col. La gente estaba tirando de una cuerda sujetada a la base del casco del barco encallado, que esta estaba apuntando al cielo. Una vez llegaron, para calentar el cuerpo, Lawrence junto a Col decidieron ayudar a tirar de la cuerda.

Pasaba el tiempo, pero el casco ni se inmutaba. Llegados a un punto, tirar de la cuerda parecía tarea imposible. Los comerciantes tenían justa razón de quejarse, pues mientras más demoraran en llegar a la siguiente ciudad, menor sería su ganancia. Al encontrarse con Ragusa, este le pregunta acerca del motivo del enojo de su compañera, cosa que ni el mismo sabía.

Lawrence, contándole la situación que sucedió
 con Holo a Col y Ragusa.

Holo estaba junto a quien parecía ser una actriz ambulante. Después de no poder con el casco del barco hundido, la gente había formado una gran fogata con harapos y leñas ya que la noche llegaba y el frio no perdonaba. Un tambor y una flauta empezaron a sonar. Poco a poco, mientras la oscuridad cubría el ambiente, una fiesta empezó a montarse alrededor de la fogata. En poco tiempo, todo un festival empezó; un festival que reunía a marineros y comerciantes, todos bebiendo vino mientras Holo y esta actriz ambulante danzaban alegremente alrededor de la fogata.

Aprovechando la situación, Lawrence empezó a recopilar información. Mientras los barriles de vino se iban acabando, los comerciantes y marineros olvidaron sus discusiones y ahora estaban al unísono, ya sea bailando o cantando, alrededor de la fogata. Incluso el mismo Lawrence, al igual que Holo, también estaban bebiendo vino.
Lesko. Una ciudad rio arriba del cual ‘el cobre fluía como agua’. El lugar del que provenían las monedas de cobre. Un certificado de giro era emitido a diario. Al llegar a la compañía Jean, esta le emitió un certificado de rechazo. La cuenca de Roef. Lesko. Huesos de un perro infernal
Lawrence cayó rendido. El sueño la había ganado.


Hay muchos detalles que no he incluido, pero, en definitiva, tornan la historia con cierto toque de misterio y hasta drama. Saw(Spice and wolf) en una novela ligera que no tiene un ambiente cliché. Sus personajes tienen una personalidad única, de manera que el autor puede aprovechar eso para crear expectación a los lectores. Sin duda, una historia que vale la pena.

Redacción: MaximuS


Imagen que aparece al inicio del libro.